Ciudad de las Artes y las Ciencias. Valencia |
Pienso que muchas de las virtudes y defectos de la obra de Calatrava no son solo atribuibles a él, sino a toda una manera de hacer arquitectura, la de los "arquitectos estrella", que se ha impuesto durante los últimos 30 años. Ninguna ciudad que se preciase debía de carecer de una buena colección de edificios rutilantes, firmados por los grandes nombres de la arquitectura mundial (Foster, Ghery, Chiperfield, Calatrava, Renzo Piano, Zara Hadid, etc..). Hoy en día, este planteamiento empieza a ser cuestionado y sustituido por alternativas menos espectaculares pero más sostenibles.
A FAVOR DE LA ARQUITECTURA DE SANTIAGO CALATRAVA
1.- La espectacularidad y belleza de su obra:
Este ha sido siempre el principal valor de su obra. Si algo no se le puede negar a Calatrava es la espectacularidad y belleza de formas de sus edificios. De hecho, el mismo asume que ante todo están concebidos como esculturas gigantescas, que lo primero que deben de hacer es cautivar al paseante con sus formas atrevidas e "imposibles", sus grandes dimensiones, el acabado blanco y luminoso, así como su relación con un entorno paisajístico concebido cuidadosamente para realzarlas. El resultado, como ocurre en la "Ciudad de las Artes y las Ciencias", de Valencia, es impactante. Cuando uno pasea por la misma, mire a donde mire, y ubicado desde cualquier punto de vista, siempre tiene perspectivas visuales espectaculares, alturas verttiginosas y salientes y voladizos increibles, que uno no puede imaginar como logran sostenerse.
Valencia: Plasticidad innegable en las formas del Palacio de las Artes |
Muy acertado también es su recurso a rodear los edificios con láminas de agua, que los realzan eficazmente.
2.- Las construcciones de Calatrava transforman de manera radical y positiva los espacios donde se insertan:Hoy es habitual recurrir a un edificio realizado por un arquitecto emblemático para que se convierta en el imán y catalizador de una operación de recuperación y transformación de espacios urbanos degradados, frecuentemente de antiguo uso industrial. Y lo cierto es que suele funcionar. Pasó con el "Guggenheim" en Bilbao y también con la "Ciudad de las Artes y las Ciencias" en Valencia. Zonas de viejas fábricas decimonónicas semiderruidas, dejan sitio a barrios residenciales nuevos, que además se convierten en los más demandados por las clases pudientes de la zona.
En Valencia esto ocurre con la Alameda y la zona de la Avenida de Francia. Aunque sólo una pequeña parte de las viviendas tiene vista directa a los edificios de Calatrava y la altura media de las edificaciones es excesiva, todo el barrio se ve favorecido por el atrayente magnetismo que emana del complejo, así como del Jardín del Turia.
Valencia: el nuevo barrio de la Avenida de Francia, junto a la Ciudad de las Artes. |
3.- Los edificios de Calatrava sirven de icono de una ciudad e imán para atraer turismo:
Aquí, el caso de Valencia es paradigmático. En los 80, era conocida por la "Ruta del Bacalao", ser el "semáforo de Europa" y lo poco atractiva que los fugaces visitantes la encontraban. Fachadas oscurecidas, casco histórico degradado, lejanía del centro al mar, pocas zonas verdes, tráfico insufrible y rondas de circunvalación atroces. Ver turistas en la ciudad era algo que causaba perplejidad.
Este panorama fue cambiando y mejorando debido a las intervenciones del Jardín del Turia, el Paseo Marítimo, la recuperación del centro histórico, etc... Pero a la ciudad aun le hacía falta un icono, una imagen mediática reconocible, que "vendiera" de manera inmediata y atrayente la marca "Valencia" por el mundo. Los edificios emblemáticos de los que disponía la ciudad hasta el momento (el Miguelete, las Torres de Serranos), eran claramente insuficientes para generar ese poder de atracción.
Consciente de esa carencia, el gobierno socialista de los años 80, encargó a Calatrava, el diseño de "La Ciudad de las Artes y las Ciencias", buscando deliberadamente lograr ese efecto. El proyecto fue luego modificado y ampliado por los populares, con mayor o menor acierto. El hecho es que hoy en la ciudad el turismo ha pasado de la nada a casi cuatro millones de visitantes anuales. Estos son atraídos principalmente por el complejo, que ha pasado a ser (aunque en menor medida que el Guggenheim), uno de los iconos turísticos nacionales de España.
Tanto por su atractivo visual como por la polémica que generan en ocasiones, casi todas las obras de Calatrava son noticia. Ello hace que en muchas ocasiones sean buscadas por los publicitarios como marco de referencia para vender sus productos. Frecuentemente aparecen como fondo en anuncios de automóviles, películas, etc.. También es habitual que sean la portada de numerosos libros de divulgación global de arquitectura destinados al público no especializado.
En el fondo, para la ciudad que acoge esos edificios es positivo, ya que no hace sino reforzar el poder de atracción que demuestran tener estas construcciones y vender la marca de la ciudad. Una construcción como la "Turning Torso Tower" de Malmo, ha puesto en el mapa a una ciudad sueca casi desconocida. Igualmente es frecuente la aparición de la "Ciudad de las Artes" en las portadas de libros divulgativos, lo que es una excelente y gratuita publicidad para Valencia.
Malmo: Turning Torso Tower |
JOSE PAYA ZAFORTEZA
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