arte y artificios: TESTIGOS INSÓLITOS: LA GRÚA DE LA CATEDRAL DE COLONIA

la catedral de Colonia vista desde el Rin

Siempre me ha fascinado la historia de la catedral de Colonia. Es la iglesia cuya construcción más se ha demorado en el tiempo, con un lapso de seis siglos entre su inicio y su conclusión. También es casi milagrosa su supervivencia a los bombardeos aliados que arrasaron toda la ciudad durante la II Guerra Mundial. Como templo más emblemático de Alemania, simboliza a la perfección el resurgimiento y la unión de lo mejor de un país a través de todos los desastres de su historia.

Iniciada en 1248, la construcción de la iglesia más ambiciosa de su tiempo, avanzó al principio con rapidez. Una vez concluido el ábside, se empezaron los brazos del crucero. Sin embargo, durante el S. XIV los trabajos se fueron poco a poco ralentizando, hasta quedar completamente detenidos por falta de financiación.

Es de suponer que los constructores esperaban una rápida renaudación de la obra, puesto que dejaron en lo alto de la torre sur, una gran grúa destinada a elevar cargas pesadas. Sin embargo, el tiempo pasó y la grúa se quedo allí arriba, mudo testigo frente al Rin del desarrollo de la ciudad.

Vista de colonia en 1531. Grabado en madera de Anton Worms. A la derecha se puede ver la catedral inacabada con la grúa

La obra estuvo parada cuatrocientos años. Sorprendentemente, durante todo ese tiempo nadie pensó en desmontar un apéndice tan poco estético. Permaneció dominando el perfil de la ciudad. Como tal quedó reflejado en todas las pinturas y vistas de la ciudad de Colonia que se realizaron durante ese tiempo. Por último, acabó convertida en uno de las señas de identidad de la ciudad.

Dibujo del S. XVII, mostrando la ya famosa grúa sobre la torre inconclusa de la Catedral

Vista de la catedral de Colonia en un grabado de 1820

La historia de la catedral podía haber terminado aquí y haber pasado a la historia como otro gran monumento inacabado, tal como le pasó a la grandiosa catedral de Beauvais. Pero en 1814 se encontraron los planos originales del S. XIV y una ola de creciente interés y luego franco entusiasmo se desarrolló en Alemania. La empresa de la conclusión del templo simbolizó para muchos alemanes el resurgimiento de su nación. Tal fue el grado de entusiasmo, que durante un tiempo se llegó a pensar erróneamente que el gótico era un estilo de origen alemán. Los trabajos, que se habían retomado en 1840, finalizaron en 1880. La catedral se consagró con la presencia del Kaiser de la nueva gran potencia.

Uno de los siete planos de la Catedral . Mide 4,05 m de longitud y se encontró en el altillo de una posada de Darmsdat en 1814. Otros se encontraron en un anticuario de París

La grúa, que por supuesto, continuaba en su sitio, fue reparada y rápidamente puesta en marcha otra vez. Después de cuatro siglos, cumplió su servicio a la perfección. Desconocemos que fue luego de ella. Presumiblemente se desmontó y desguazó una vez cumplido su servicio.

Vista de la catedral en proceso de conclusión. La gran grúa medieval todavía se mantiene sobre la torre sur.

Detalle de una foto de época mostrando la vieja grúa, que logró sobrevivir cuatro siglos sin problemas.

Las torres de la Catedral, a punto de ser terminadas

Ahora que se habla y polemiza sobre conveniencia o no de terminar la Sagrada Familia de Gaudí, es interesante tener en cuenta un precedente tan notorio como la catedral de Colonia. Máxime teniendo en cuenta que la construcción del templo barcelonés no se ha llegado a detener nunca.

Impresionante vista de uno de los pináculos de las torres, recién terminado

La historia de la Catedral continúa durante la II Guerra Mundial. Pese a que todo a su alrededor fue arrasado, la Catedral casi logró salir indemne del conflicto. Solo cayó una bomba en una torre, que sufrió severos a daños, pero no se derrumbó. Lo que si causaron las ondas expansivas de las explosiones fue la pérdida de numeroso vitrales que saltaron en pedazos durante aquellas noches terribles.

La Catedral, rodeada de la devastación, después de la guerra

Hoy, la catedral se considera el templo más sobresaliente de Alemania. Su entorno ha sido reconstruido y es el emblema de la ciudad de Colonia. Los problemas a los que se enfrenta hoy son la contaminación así como el ennegrecimiento que sufre uno de los tres tipos de piedra con la que está construida.

Los que amamos la catedrales, tendemos a pensar en ellas como si fueran personas. Sufrimos con sus males y nos enorgullecemos de sus logros. Son una mezcla perfecta de belleza, fragilidad y fortaleza. Nos muestran lo máximo que el entendimiento humano ha sido capaz de hacer con el arte de la piedra. Son edificios que en su momento recogieron los sueños y las aspiraciones de comunidades enteras.